Marconi, Popov o Tesla?

La discusión se extiende desde fines del XIX a la actualidad y depende de la simpatía que se tenga por el país de orígen de cada uno de los involucrados.
Para celebrar su aparición, valga citar a Giovani Sartori en Homo Videns: "La palabra es un “símbolo” que se resuelve en lo que significa, en lo que nos hace entender. Y entendemos la palabra sólo si podemos, es decir, si conocemos la lengua a la que pertenece; en caso contrario, es letra muerta, un signo o un sonido cualquiera. Por el contrario, la imagen es pura y simple representación visual. La imagen se ve y eso es suficiente; y para verla basta con poseer el sentido de la vista, basta con no ser ciegos. La imagen no se ve en chino, árabe o inglés; como ya he dicho, se ve y es suficiente. [...]La radio es el primer gran difusor de comunicaciones; pero un difusor que no menoscaba la naturaleza simbólica del hombre. "

Al márgen de esto, Cuba es la isla de las FM emblemáticas. A dos de ellas habré de referirme:

RADIO RELOJ

En sintonía que no recuerdo ni es necesario conocer, está Radio Reloj. El concepto de radio reloj está sobradamente desarrollado en esas dos palabras. Es como si transmitieran sobre el 113. Los locutores son por lo general dos o tres, uno de ellos una mina (no sé cómo hacen para mantener el mismo formato 24 hs. al día), y van leyendo titulares de interés general sobre un tic tac que te trina. Se cumple un minuto, avisan la hora exacta y siguen. Músicas jamás.

Para verla en funcionamiento, escuchar el final de me gustas tú, de José Manuel Arturo Tomás Chao.

RADIO REBELDE

Atemorizados por la avanzada revolucionaria, alertados de la creciente notoriedad que tomaba el movimiento guerrillero y concientes de su propia debilidad, los funcionarios de la dictadura de batista recurrieron al armamento dialéctico, promoviendo la desinformación como estrategia de combate, algo que ya habían practicado a fondo cuando fue el ataque al moncada, en el 53. Las fuentes batistianas hablaban de una guerrilla derrotada, de episodios aislados y controlados, del magnífico despliegue militar tendiente a sofocar la insurrección. Triunfante la revolución, el bombardeo mediático vino desde afuera.

En razón de esto, se entiende que la guerrilla -también- necesitara un aparato mediático a su servicio. Sus dos bastiones fueron, en orden de aparición, Radio Rebelde y Prensa Latina. Prensa Latina fue la agencia de prensa que se ideó con la finalidad de rebatir las crónicas de AP y UP, las cuales respondían a intereses digamos que opuestos a los objetivos de la revolución. Radio Rebelde -otro nombre para celebrar- era una radio que transmitía clandestinamente y daba las noticias que la dictadura escondía. Bastante seguido, los líderes revolucionarios hacían a través de RR sus arengas. Hoy por hoy radio rebelde perdió su encanto a manos de un nuevo director de programación que priorizó contenidos menos formadores de conciencia, del estilo música cachengue, locutores-animadores y consignas tipo vale.