It's raining, men

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Está lloviendo, macho.
En realidad ya no, pero esto -¿qué cosa?- se me ocurrió cuando empezó la decadencia y comenzó a precipitar. Qué triste la sensación de tener una gran idea cuando casi ya no vale. En este caso sí, -¿sí qué?- porque si nadie la lee en el momento que la escribí mantengo las chances de que la lean mientras no llueve. Y así puede pasar también que la lean de acá a un tiempo un día que justo esté lloviendo. Y pueden leerla un rato después de que llovió y pensar que llegué tarde con la idea. O leerla un poco antes y sentir que me anticipé a los tiempos. Y puede pasar de que nunca la lean. Y...

Una de tantas de Schopenhauer (volúmen I)

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Acerca del arte de no leer:
"Para leer lo bueno es necesario no leer lo malo, porque la vida es corta y el tiempo y las fuerzas limitadas."

Él soy yo (volúmen I)

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¿Cuántas personas de existencia real están nomencladas en nuestras mentes como personajes de novela? Quiero decir, ¿a cuánta gente tenemos de nombre pero no seríamos capaces de reconocer por la calle? En mi caso, la lista es larga y son más de los que querría pero unos cuantos menos de los que podrían ser.
Arrancando por aclarar que hablamos de gente que no conocemos porque realiza sus actividades características sin necesidad de acompañar su trabajo con su presencia física hay, se me ocurre, dos puntos de partida: uno que llamaremos de doble negación existencial, aquél sujeto que nunca hemos conocido y al que nunca hemos tratado de dar entidad, y otro que llamaremos de negación simple, aquel sujeto que nunca hemos conocido pero al que hemos atribuido entidad supuesta.
En el primer caso, aunque podríamos abocarnos a un análisis casuístico de las múltiples motivaciones personales que llevarían a abstraerse del hombre detrás de la obra y para evitar caer en fútiles juicios de valor, nos limitaremos a expresar nuestro agradable sentir en los casos en que no se opere de este modo por falta de voluntad, ya que de encontrarse el receptor del trabajo en la necesidad de imaginar al emisor del mismo, debe hacerlo de inmediato y lo más fidedignamente posible a la información recabada hasta el momento. Decimos entonces que la doble negación se justifica en situaciones de abstracción pura.
En el segundo supuesto hablamos de un esfuerzo creativo ad-hoc que llega a veces a complementar la metabolización del trabajo que se examina, pero que presenta cuadros patológicos. En niveles moderados, la disociación simple entre el nombre y la persona puede ser saludable. Se recomienda nunca llegar al límite de permitir que la creación sustituya al verdadero creador.
Hace un tiempo largo, cuando tuve esta idea y comencé a googlear los nombres de estos hombres ilustres, pensé que iba a llevarla a cabo de inmediato, y que la iniciativa se retroalimentaría automáticamente. Sin embargo, pasó el tiempo y las fotos de acá abajo y algunas otras de distinta temática quedaron guardadas en una carpeta que hoy abrí.

La primera entrega de esta desopilante iniciativa, está orientada a desenmascarar dibujantes, contractualistas y tangómanos.
Dibujantes. En orden de gusto personal:
Liniers: Macanudo
Caloi: Clemente y cositas
Quino: Mafalda y cositas
Sendra: Yo Matías


Tangómanos. En orden de aparición:
Pugliese
Piazzola
Goyeneche
Discépolo
Troilo





Contractualistas. En orden cronológico:
Thomas Hobbes
John Locke
Jean Jaques Rousseau


La hora del planeta o de cómo perderle el miedo a la oscuridad

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Gacetilla de Prensa:
La Fundación Vida Silvestre y World Wildlife Fund, con el apoyo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, convocan el próximo sábado 28 de marzo entre las 20.30 y 21.30 horas, a apagar las luces durante una hora en una acción simbólica contra el cambio climático.

Alpargata Wilson

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Igual que en la tele, en la radio pasan cosas que si no venís siguiendo el programa, te pasan de largo. Desde hace bastante, la metro se ganó el 1 en todos los lados dónde hay una radio preseteada. Esto que cuelgo es la animación de una conversación con un oyente. Humor universal.







Para entendidos

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Así como a los estudiantes de medicina les divierte cortar el nombre de las materias que cursan, y hacer histo, pato, anato, micro, farmaco, etc., dejando las sílabas del final para más adelante, a los estudiantes de derecho nos divierte la jerga. Desde muy al principio empieza a ganarte la cabeza la idea de que ninguna palabra que conocías tiene en los libros el significado que vos creías. Pero es sólo al comienzo. Terminás por incorporar esas palabras, no sólo a respuestas de parciales, sino hasta en oraciones complicadas de la escritura cotidiana.

Esto, señores, es un poema jurídico. Créditos a quien correspondan.

¿Por qué me dejaste amor?
Si yo, reconozco jurídicamente que te amo
¿Cómo no apelar a vos?
Si fuiste mi recurso de amparo; mi tribunal de casación; mi unificador de sentimientos; mi única instancia.

¿Cómo no reconocer tus derechos posesorios sobre mi?
Si en mi desarraigo fuiste mi domicilio constituido
o procesal (nunca supe la diferencia amor, ¿la hay?)

Y aquellas noches amor, oh!!!; Cómo olvidarlas!!;
Si en ellas vivimos los hechos conducentes, que en
definitiva, permitieron mi apertura a prueba.

Y es cierto mi amor,
sé que la documental no llegó a cumplirse,
pero debes reconocer, al menos,
que en la confesional mis sentimientos fueron más claros que nunca . Casi diría que hicieron plena prueba.

Ay amor! Mi dulce exhorto! Mi notificación válida,
mi posesión legítima, aunque viciosa, mi sentencia favorable y definitiva:
¿por qué me abandonaste?
¿Porqué tuviste esa dura contestación a mi demanda?


¿Acaso no cabe, todavía, en tu corazón un recurso extraordinario?
¿Acaso no transarías, no conciliarías? ;No homologarías, no acordarías?;
¿No Bordarías, no Llambías?

Mi amor. larga viene siendo mi espera. y mi quita.
Mi amor, el tiempo corre y los sentimientos caducan .
¿o prescriben? (Maldita confusión entre caducidad y prescripción)

¿Sabés? Con este poema jurídico y amoroso,
amoroso y jurídico espero revertir la carga de la prueba,
espero tu última respuesta. pero sin chicanas amor,
que mi dolor no las toleraría.

Es que no puedo negar que mis sentimientos entraronen cesación de pagos,
pero por favor amor no me pidas la quiebra. Busquemos un acuerdo preconcursal o preventivo.
Busquemos una salida, la que prefieras, porque sino amor, moriré.
Moriré antes de que el proceso alimentario haya concluido.

Mi caso federal, cuánto te he amado!
siempre con probidad y buena fe
¿Y vos como me contestaste?
con temeridad y malicia, corriéndole traslado a otro, a un tercero,
a un, perdón que lo diga, un 'penitus extranei' que rompió nuestro vínculo.

Ay si la 'manus inectio' todavía existiera!
¿Imaginas mi amor con qué parte del cuerpo de ese 'extranei' me hubiera cobrado?
Exactamente de ahí mi amor, imaginas bien.

Y así y todo mi amor, mi viejo amor jurídico,
me dejaste. Me dejaste amor. me dejaste. me dejas. me.
Porca miseria amor!

Pero sabes? A medida que deslizo mi romántica pluma
sobre este retazo de papel receptor de emociones, de congoja
y negra tinta pegajosa y maloliente que a chorros deja mi frente sucia,
me doy cuenta que lo nuestro nunca hubiera sido posible:
¿Cómo yo, un amante de veraz, preparado con Salvat, Zaffaroni, Soler, Abbot et Costello – entre otros tratadistas más -, pude enamorarme de vos,
cometiendo este error de derecho inexcusable ?

*611

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El celular que tuve estos últimos dos años perdió ayer la titularidad a manos de un flamante Sony Ericson, con muchos ringtones, camarita, inteligencia artificial, memoria emotiva y ensamblado -como corresponde- en el DF. La noticia, que debe ser tomada con liviandad, puede transformarse rápidamente en una entrada aun menos interesante, sobre todo por la intrascendente información que tengo para aportar.

La salida del Motorola se dio en el transcurso de la semana: el sábado pasado, no éste sino el otro, mi madre se acerca con la propuesta y un número telefónico para contactar a Moviestrella. Llamo y me informan los plazos: 48 horas hábiles para la entrega, otras 48 horas para la habilitación del servicio. A partir de allí, en menos de seis minutos concreto la operación. Me informan antes de desearme un buen día que la entrega la estarían realizando el miércoles por la mañana. Algo que me sale muy bien a mi en situaciones de compra es quedarme con la pregunta a mitad de camino. Pero, al igual que quienes están leyendo atentamente, me di cuenta de que llegado el miércoles las horas hábiles eran más de las que me habían dicho. Quedaba entonces pasar el rato hasta el miércoles y creer en lo que había escuchado. El domingo lo pasé fácil. El lunes me levanté, lo viví y me acosté pensando que todavía faltaban dos días. El martes no hice más que planear el momento de la entrega, imaginaba mi conversación con quien lo trajera, la atenta lectura y firma del contrato de adhesión con esas exquisitas cláusulas predispuestas, mis primeros contactos con el aparato, qué fotos sacaría primero y cómo avisaría a mi gente que cambiaba de número. El miércoles muy temprano salí a la puerta por si no escuchaba el timbre y se iban sin entregármelo. Cerca del medio día, cuando perdía la esperanza, llegó. Volvía a ser un boludo con celular (al respecto véase el siguiente video de todo por dos pesos http://www.youtube.com/watch?v=f6uoAT7jb9E), me reinsertaba en el mundo de las telecomunicaciones. Ahí volví a ser el de siempre.
Tener el celular cargado y listo para usar pero sin que funcione es peor que no tenerlo. Que te hagan esperar un poco más pero que te lo traigan listo para usar sería más inteligente. Pero de maliciosos que son, no lo hacen así. En fin, los dos días hábiles antes de la activación no se cumplían el viernes, sino el lunes, así que no lo pude disfrutar ni exhibir el fin de semana. Y ya que estaban, tampoco me lo activaron el lunes.

El pasado a retiro queda en archivo con un total de 80 horas, 54 minutos, 37 segundos de llamadas entrantes y salientes. Lo cual significa que estuve un fin de semana largo con el teléfono en la oreja. Lo cual significa que le di duro y parejo. Y eso que para mi era un público de bolsillo. Si antes que un poco por pose, un poco por convicciones me mantenía al márgen del bluetooth, los ringtones y todo lo que alejara al celular de mi concepción de celular lo usé tanto, no quiero imaginar lo que se viene ahora.

Para terminar, regalo mi idea de que algún celular tiene que venir con control remoto para quien quiera hacerse millonario con ella.

Así en la ciencia como en el cielo

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Estamos de estreno. Sabemos: si hay una cosa un poco más linda que estrenar es reestrenar. Y aunque en esta ocasión hablamos de estrenar blog, estoy pensando muy lejos, casi hasta donde no llega el hombre con sus armas. Nuestra vida es un riquísimo circuito de estrenos, no estrenos, reestrenos y estrenos. Y en quien otro podemos pensar cuando hablamos de esto que en el querido Kuhn, el que está mirando para este lado como leyendo lo que escribo. Thomas Kuhn, el que nos fumamos en Pensamiento Científico atrás de Popper. Qué tipo que sacudió las maracas del Siglo XX.. Estos son esos pocos momento en la vida en que quisiera ser un sabio epistemólogo y hablar de Kuhn sin ratonear información de la internes. A lo menos, trataré de ser fiel a la fuente y decir lo justo y necesario, lo realmente justo y necesario porque da para mucho:
La comunidad científica comparte determinadas técnicas y conocimientos, llamados paradigmas. Estos paradigmas universalmente aceptados alcanzan ese status(4656.8653) cuando prueban ser los más aptos para la resolución de problemas tenidos por agudos. De allí en más son el sustento de todo avance científico, ya que el estudio de la realidad se hace sin perder nunca de vista el paradigma dentro del cual se lleva adelante. En principio, el trabajo dentro de un paradigma, la práctica científica que dentro de él se realiza no se cuestiona. Existe una especie de tradición y se respeta el modelo dado. El paradigma aparece como una solución aparentemente permanente para sus problemas. Sucede en determinado momento que la ciencia alcanza un grado tal de maduración que se hace necesario un cambio de estructuras, el paradigma que rige no da más, no banca. Hasta que se reconoce esta situación de crísis, el paradigma sigue aplicándose y encontrando nuevos obstáculos. Cuando finalmente el paradigma sucumbe, por medio de revoluciones que sobrevienen a las crísis de las que hablamos, se da el cambio de un paradigma a otro. Este nuevo paradigma que ha surgido para resolver cuestiones complicadas que el anterior no había podido resolver, encontrará nuevas dificultades y caerá en la batalla bajo el filo de uno nuevo, más apto. Y ahora podríamos enganchar con Darwin, pero por le momento no.Nuestra cabeza está pogramada de una forma un poco rara para el estreno. La frontera entre el estreno y el no-estreno es tan difícil de delimitar como una línea de bajamar en el sudeste asiático. Un gran emblema del estreno es la zapatilla. Tengo el recuerdo ya desde muy chico de tener especial cuidado los primeros días de zapatilla
nueva. Tengo el recuerdo también del cruel y legendario "feliz estreno". Temo por la integridad del mundo el día que el "feliz estreno" se traslade a otros estrenos.

Estrenar blog es lo más cercano a mostrar las tetas que nunca voy a tener. Es lo más cerca que puedo estar de un desnudo artístico. Y es lo más cerca que puedo estar de Kuhn. Así que los bienvengo una vez más, ésta vez oficialmente, a mi nuevo paradigma.

Pena de muerte

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Ha sido éste el verano que más mosquitos maté pero tambien el verano que más mosquitos me picaron. Y estoy seguro de que esta bélica relación no va a quedar acá. Porque si aun matando a muchos sigue habiendo otros tantos dispuestos a combatir, el efecto disuasivo de esas muertes no tiene dinámica. Cada mosquito que veo y consigo matar está pagando lo hecho por otro de su misma especie, sólo que él no lo sabe. Aunque pudiera explicarle a cada uno de estos parásitos hematófagos los motivos supraindividuales que tengo para quitarles la vida tampoco se lo haría saber. Sin embargo me siento un hombre razonable cuando los mato en el mismísimo intante de comisión del ilícito acto. Tengo en ese momento la certeza de haber espantado a los que acompañaban al que resulta vícitma, de haberles hecho huir a buscar una vida más sana. Pero es el instinto no? A ellos los mueve el instinto de supervivencia, a mi el de venganza. Así funciona la venganza: lo que me hiciste y un poquito más. Justamente es eso lo que tiene de peligrosa. El vengador siempre se pasa de rosca y próximamente lo vengarán. Ahora a la par que escribo esto me doy cuenta del brete en el que me metí por no saber quién es el que no es el vengador. Porque si el vengador es "el que venga o el que se venga" puede vengarse en nombre propio o en nombre de otro. Para más, "vengado" no aparece en el diccionario. Pero así, con estos u otros nombres, funciona la venganza. Así funcionan el fútbol, el padrino, el divorcio y los juicios por daños y perjuicios.
No puedo evitar referirme a la información de público conocimiento que olvidamos y rememoramos cada tanto: la que pica es la hembra. Pero todo en este mundo, y más que en ninguno en el mundo animal, tiene explicación: el macho puede vivir sin jalarse un ser humano pero la hembra no, esto es rotundamente así. Pero a partir de un astuto pensamiento inductivo (premisa A sólo las hembras pican, premisa B sólo las hembras amamantan) podemos afirmar que la hembra necesita de nuestra sangre para la lactancia. Humanicemos este comportamiento e imaginemos a una madre tal vez primeriza que imposibilitada por la naturaleza para proveer a su criatura, debe brindarse cada día a la búsqueda de alimento. Recorre distancias enormes, se enfrenta a la contaminación y otros depredadores, incluso a todas las mujeres del mundo en su misma situación y no descansa hasta conseguirlo. Manteniendo en la mente esta triste realidad, descubrí este verano que los mosquitos han desarrollado aptitudes de camuflaje y vuelo que antes no tenían. El pelaje de estas bestias aladas despista per sé y mucho más en vuelo. Por último y como corolario de lo que aparece a las claras como una craneada connivencia entre éstas porquerías y las moscas, han perfeccionado sus técnicas de vuelo.
Y una cosa más: mi abuela vive en un piso 15 y he vivido situaciones de picadura de mosquito a esa distancia del piso. En ese piso 15 hay también hormigas, pero no sé por qué justifico más su presencia que la de los dípteros.
Material de lectura complementaria.
información en inglés de la American Mosquito Control Association, gente con los mismos problemas que yo pero un poquito más formada e informada y con un nivel de paranoia un poquito más alto que el mío. La pestaña de links es de lo más completo que puede conseguirse
una página muy bien armada que te vende armamento de guerra y te explica cómo funciona.
para buscar focos reproductivos en un jardín virtual.

Very Variété

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Qué rico es el olor a nuevo.
BIENVENIDOS